El escritor madrileño Juan Eduardo Zúñiga ha sido galardonado con el Premio Nacional de las Letras Españolas 2016. El Premio lo concede el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte para distinguir el conjunto de la labor literaria de un autor español cuya obra esté considerada como parte integrante del conjunto de la literatura española actual escrita en cualquiera de las lenguas españolas. Está dotado con 40.000 euros. El jurado le reconoce como "un maestro tanto en el género del cuento, realista y fantástico, como en el ensayo literario y la traducción”.
Juan Eduardo Zúñiga (Madrid, 1919) estudió Filosofía y Bellas Artes y se especializó en lenguas eslavas. Su literatura tiene un hondo compromiso con la vida: los materiales de los que parten muchas de sus ficciones pertenecen a la más estricta realidad y los conflictos que en ellas se articulan son patrimonio de seres humanos cuyas conciencias vivieron asediadas en ambientes de intensa perturbación social y a los que el autor otorga voz, humanidad y pensamiento. El jurado le ha destacado por "una vida dedicada a las letras en las que ha sido un maestro tanto en el género del cuento, realista y fantástico, como en el ensayo literario y la traducción".
Entre su obra destaca la trilogía constituida por 'Largo noviembre de Madrid', 'La tierra será un paraíso' y 'Capital de la gloria', que conforma un ciclo de cuentos sobre la vida en Madrid durante la Guerra Civil y la Posguerra. Un conjunto homogéneo que, preservando la plena autonomía de cada relato y de cada volumen, posee un sentido global y una atmósfera unitaria que enriquecen todas sus piezas y que se manifiesta en una máxima que cifra y compendia el aliento que preside toda la trilogía: "Pasarán unos años […] para que no lo olvides". Bajo esta aparente paradoja se formula la motivación de los treinta y tres cuentos que la componen, cuyo significado común esta promovido por la tensión dialéctica que afecta a sus personajes, que se debaten entre la práctica del olvido como añagaza de la supervivencia y el ejercicio de la conciencia para asumir el presente como único aval de la lucidez y la dignidad.
Su obra prosigue con 'Misterios de las noches y los días' (1992), 'Flores de plomo' (premio Ramón Gómez de la Serna 1999) o su libro de relatos más reciente, 'Brillan monedas oxidadas' (2010). Su conocimiento de la cultura rusa y búlgara le permitió profundizar en el estudio de la obra de célebres escritores de la Europa eslava.
El galardón que recibe se suma al Premio Nacional de Traducción que recibió en 1987 y al Nacional de Crítica de 2003.
Vía | Agencias/Cátedra
Imagen | Gemma Pellicer