La Feria del Libro de Madrid se clausuraba ayer con un balance francamente positivo: una gran afluencia de visitantes y un incremento de ventas, respecto a 2013, cercanoal 5 por ciento, lo que sitúa el importe de las ventas que se han generado a 7.450.000 euros.
La Feria del Libro de Madrid, que celebraba su 73ª edición, es una cita clásica para los amantes de las letras de la capital. Las buenas cifras, no obstante, tienen que estudiarse con atención para no echar campanas al buelo antes de tiempo. Las ventas del libro son en su mayor parte estacionales y se concentran básicamente en el Día del Libro y ferias como ésta; la mayoría de la población visitará poco o nada las librerías hasta que se acerquen las fiestas navideñas, otro gran momento en el que se acude al libro como objeto de regalo.
Teodoro Sacristán, director de la FLM, opina que hay que «recuperar la importancia de la lectura es una necesidad urgente, que requiere del esfuerzo y la imaginación de todos los agentes de la cadena de valor del libro y de los responsables de Educación y Cultura de las distintas administraciones». Un empeño pedagógico, cabría decir, que pusiera el acento sobre el peso de la lectura, ejercicio solitario, en la calidad de la formación de los ciudadanos y de la sociedad. «Vivimos inmersos en una hiperconectividad que nos crea la falsa ilusión de estar informados», recalca.
Efectivamente, a nadie escapa que la imagen de los transeúntes, o de los pasajeros del transporte público, es mayoritariamente la de alguien atendiendo a sus dispositivos electrónicos portátiles, bien escuchando música, bien conectados a las redes sociales. «Tal grado de conexión exige mucho tiempo y atención. Como consecuencia, nuestro vínculo con el conocimiento y la información se ha hecho más superficial. Es tan disparatado suponer que ese conocimiento no exige de nuestro esfuerzo individual, que nos llegará por una suerte de ósmosis, como pensar que el contacto con el balón nos convierte en Leo Messi o Cristiano Ronaldo. Todo esto nos hace, sin duda, más vulnerables a la manipulación».
En el viejo debate sobre si la sociedad de la información ha traído a más o menos lectores, o sobre la calidad de esos lectores, quizá esas buenas cifras que se señalan al principio de esta noticia pueden dar cierto margen de confianza en que no todo está perdido.
Vía | ABC
Foto | Vailos.com
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